Endrick juega menos de lo que debería jugar

Durante esta temporada, Endrick ha sido prácticamente invisible en los planes de Xabi Alonso. Apenas ha sumado 22 minutos, el registro más bajo de toda la plantilla. Desde el pasado domingo incluso Valverde le ha superado en ese apartado. En Valdebebas esta situación genera una notable perplejidad, ya que cuesta entender que un futbolista con el talento del joven brasileño haya tenido un papel tan residual.

El futuro de Xabi Alonso no pinta bien

La primera ronda de la Copa del Rey, disputada en Talavera, le brindó por fin la oportunidad de salir de inicio. Con su futuro ya encaminado hacia Lyon en el mercado de invierno, Endrick quiso demostrar que su verdadero nivel está muy por encima del protagonismo que se le ha concedido hasta ahora. Y lo hizo desde el primer minuto, dejando claro que era el jugador con más ambición y energía sobre el césped.

Las acciones más peligrosas del Real Madrid nacieron de sus botas, con el equipo vestido de negro en Talavera. De hecho, la primera ocasión clara llegó tras un brillante pase suyo al espacio para Mbappé. Donde el francés no logró convertir en gol ante la rápida intervención del guardameta local.

A partir de ahí, Endrick se convirtió en el delantero que más problemas generó a la defensa rival. Sus desmarques, su potencia y su instinto ofensivo destacaron en un partido en el que su actitud superó con creces a la del resto de atacantes.

El brasileño mantuvo la intensidad durante todo el encuentro, buscando un gol que se le resiste desde el choque ante la Real Sociedad en las semifinales de Copa, el pasado 1 de abril. No pudo romper la sequía, ya que fue sustituido a falta de 13 minutos, con el marcador 0-2. Poco después, el Talavera recortó distancias.

Detrás de su inminente salida del club está su gran objetivo: regresar a la selección brasileña y estar en el próximo Mundial bajo las órdenes de Ancelotti. Más que una aspiración, es una auténtica obsesión. La falta de continuidad en el Madrid le ha apartado del radar de la ‘Canarinha’.

Endrick necesita jugar, y hacerlo en partidos de peso, no únicamente en encuentros de rotaciones sin verdadera relevancia en los planes del técnico para las grandes citas. Con solo 17 años ya dejó huella con Brasil, marcando goles en escenarios tan emblemáticos como Wembley y el Bernabéu. Hoy, sin embargo, ha quedado fuera.

Recuperar su lugar en la selección no será sencillo. La competencia es feroz: Raphinha, Rodrygo, Vinicius, Joao Pedro, Martinelli, Luiz Henrique, Estevao o Richarlison, entre otros, ocupan ese espacio. El margen de tiempo para volver a situarse donde estaba hace dos años es mínimo. Por eso, Endrick ha decidido marcharse.

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