Una derrota que solo entiende quien ama sin condiciones
WROCLAW, POLAND - MAY 28: Fans of Real Betis show support for their team ahead of the UEFA Conference League Final 2025 between Real Betis Balompie and Chelsea FC at Stadion Wroclaw on May 28, 2025 in Wroclaw, Poland. (Photo by Stuart Franklin/Getty Images)
Ayer se disputó la final de la Conference League entre Betis y Chelsea. Polonia iba a ser testigo de una conquista verdiblanca que iba a inundar sus calles y su estadio, llevando en volandas al equipos de sus amores. La primera parte de los de Pellegrini fue magnífica. Abde, Isco y Bartra desatados, buena actuación en general de todo el equipo. Unos primeros 45 minutos que resumían a la perfección la gran temporada que se ha marcado el Real Betis este año. Sin embargo, la segunda mitad fue más dura de lo esperado. Los verdiblancos bajaron el nivel considerablemente, dejando el terreno libre para un Chelsea despiadado que no se guardó nada para dentro y terminó en derrota y goleada.
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Motivos para estar orgullosos
Y es que ya lo decía Isco en la entrevista post-partido, «esto es fútbol». Ayer casi toda España y en especial Sevilla, estuvo con el corazón encogido, viendo como un equipo, una familia y una afición quedó destruida en una segunda parte. Unos jugadores derrumbados, frente a los suyos, a su gente, que todo y más le habían entregado durante todo el encuentro. Esta final iba por ellos, por esos béticos que cruzaron Europa en busca de sus colores, para apoyar a sus guerreros. No olvidar por supuesto, por todos aquellos que ayer llenaron el Benito Villamarín. Un estadio que iba a ser testigo, una última vez, de cómo era estar lleno de amor verdiblanco.
Porque ayer no solo se jugaba una final. Ayer se jugaba un partido en el que estaba presente el pasado, por todos esos aficionados que nunca vieron a un Betis ganando una final europea. Por todos aquellos que sufrieron las peores etapas de un equipo, que vuelve a estar en lo más arriba del todo. Y por todos aquellos, que pase lo que pase, siempre han apoyado al «manquepierda«.
Sin duda alguna, lo que se vivió ayer en Polonia y en especial esta temporada, es para estar orgulloso como bético. Un equipo fabuloso y una afición entregadísima, el binomio perfecto. Un binomio que no pudo cumplir su sueño, pero que llenó a España del orgullo y la entrega, que la afición verdiblanca da siempre a los suyos.
Autor: Salva Rodríguez / Instagram: @salvaarodriguez_
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