Un Valencia renovado con fichajes quiere volver a Europa

El Valencia CF ha completado un mercado de fichajes marcado por la renovación de su plantilla y la búsqueda de competitividad para luchar por volver a Europa. Con movimientos importantes en todas las líneas y la salida de nombres relevantes, el equipo afronta la temporada con ilusión, aunque no sin incógnitas.

La marcha de Giorgi Mamardashvili, pilar de la temporada pasada, deja un vacío difícil de llenar. Julen llega como gran promesa y está respondiendo bien, pero aún no alcanza el nivel del guardameta georgiano. Por su parte, Rivero sustituye a Jaume, aunque su perfil de suplente de Segunda División genera escepticismo. Dimitrievski se mantiene como garantía en la segunda línea, pese a haber buscado salida.

La zaga es, sin duda, la línea más debilitada. Se marchan Mosquera, Yarek, Cenk y Aarons, mientras que las llegadas de Copete y Cömert no parecen suficientes para cubrir la pérdida de talento. Mosquera no quiso renovar y Yarek fue vendido por 10 millones, pero su salida es vista como una decisión difícil de comprender. La falta de fichajes de mayor nivel hace que esta zona del campo sea el mayor interrogante del equipo.

La medular pierde a Enzo y Guillamón, pero incorpora a Santamaría y Ugrinic, dos jugadores jóvenes y con proyección. Además, la renovación de Javi Guerra asegura liderazgo en la zona creativa, mientras que el club también cierra las de César Tárrega y Diego López, garantizando continuidad para el futuro.

Es la línea que más se ha transformado y, probablemente, la que más ilusiona. Las llegadas de Raba, Beltrán, Danjuma y Ramazani aportan dinamismo, regate y gol. Aunque la no llegada de Sadiq fue una decepción, el ataque parece haber ganado profundidad y variantes respecto al curso pasado.

El balance global es positivo. Se han marchado jugadores que no aportaban y se ha apostado por talento joven y fichajes con potencial. Sin embargo, la defensa sigue siendo el talón de Aquiles del equipo.  El objetivo está claro: volver a competir en Europa. La afición lo exige y el equipo parece tener las herramientas para lograrlo, siempre que consiga solidez atrás