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Qatar 2022: El mundial de la vergüenza

El mundial de Qatar

Hoy empieza el mundial de Qatar, el partido inaugural se jugará a las cinco de la tarde y será la anfitriona contra Ecuador. Un mundial que se juega entre noviembre y diciembre y que, desde el principio, ha venido cargado de polémica. Todo comenzó hace 12 años, en 2010, antes de que España ganase el mundial, con las distintas propuestas para organizar los mundiales de 2018 y 2022. Un fraude, muchos implicados y un mundial manchado de sangre.

La elección de Qatar

La FIFA hacía poco había puesto como normas que, si un continente organizaba un mundial, no podría volver a hacerlo hasta dentro de dos mundiales. Por eso mismo las candidaturas se dividieron entre las europeas y las no-europeas y se votaron de forma conjunta. Por el mundial de 2018 competían las de Inglaterra, Bélgica-Holanda, España-Portugal y la finalmente ganadora Rusia. Para organizar el de 2022, Corea del Sur, Japón, Australia, Estados Unidos y Qatar. Qatar y Estados Unidos se disputaron la organización del mundial hasta la última ronda, donde ganó el país qatarí con 14 votos frente a 8.

La elección de la sede era elegida por 24 hombres, 24 personas que votarían y decidirían por su cuenta la futura sede de dos mundiales. Varios miembros pactaron entre ellos y, con el propósito de asegurar su elección, Qatar sobornó a varios para comprar su voto. Una de las reuniones que se llevó a cabo, fue la del entonces presidente de Francia, Sarkozy, junto a Platini y Al Thani. Reunidos en el Elíseo acordaron el voto a Qatar a cambio de inversiones del emirato del Golfo en Francia. Las cuales fueron, la futura compra del Paris Saint Germain y la compra de un canal televisivo de deportes.

Presidente Francés Nicolas Sarkozy junto a Bin Hamad Al Thani (Foto por ERIC FEFERBERG / AFP)

La elección de Qatar cambiaría para siempre a la FIFA. Estados Unidos, indignada por su derrota, encargaría al FBI una investigación que acabaría descubriendo una trama de regalos y sobornos que propiciaron este resultado en la votación. Varios dirigentes de la FIFA fueron detenidos, presagiando todo el movimiento corrupto que se escondía tras el organismo más importante del fútbol mundial. El Qatargate fue una investigación que destapó el mayor escándalo de corrupción en el deporte y que sigue dejando muchas incógnitas sobre qué sucedió en realidad.

Los hombres de la FIFA

De los 24, solo 22 participaron en la votación final. Antes Amos Adamu y Reynald Temari fueron acusados de aceptar sobornos. Del resto, 16 de los 22 ejecutivos que votaron el Mundial de Qatar 2022 están en manos de la justicia. Michel Platini, expresidente de la UEFA, inhabilitado por cuatro años acusado de aceptar sobornos por la designación de Qatar. Sepp Blatter, entonces presidente de la FIFA, inhabilitado por seis años al aprobar un pago de 1,5 millones de euros a Platini. Jack Warner, vicepresidente de la FIFA, suspendido de por vida, acusado de aceptar sobornos, y condenado en Estados Unidos.

Chuck Blazer, exsecretario de CONCACAF, cobró 22 millones de euros en sobornos y fue condenado por evasión de impuestos. El mítico exjugador Franz Beckenbauer, involucrado en tres investigaciones, las que corresponde a los Mundiales del 2006, 2018 y 2022. Vitali Mutkó, viceprimer ministro ruso hasta el 2016, involucrado en la trama de dopaje de Estado desvelada en los juegos de Sochi, expulsado de por vida del COI (Comité Olímpico Internacional).

El español Ángel María Villar, expresidente de la RFEF, sancionado en el 2015 y señalado por el comité ético de la FIFA, acusado de no colaborar en la investigación de las designaciones del 2018 y 2022. Mohammed Bin Hammam, clave en la elección de Qatar 2022, castigado de por vida por el comité ético de la FIFA.  Nicolás Leoz, condenado, se enfrenta a una extradición. Ricardo Teixeira y Rafael Salguero, también siendo investigados. Julio Grondona, fallecido en 2014, se adjudicó 8,5 millones de euros en sobornos.

Issa Hayatou, ex presidente del fútbol africano, Worawi Makudi, Chung Mong-Joon y Junji Ogara completan los 24 hombres de la FIFA investigados de los que no se escapa ninguno. Recientemente en una entrevista, Sepp Blatter, a pocos días de celebrarse el mundial, ha hablado sobre lo acontecido hace una década. Entre sus declaraciones, ha continuado echando la culpa a su antiguo aliado, Michel Platini, y ha asegurado que el mundial de Qatar fue un error. «Para mí está claro: Qatar es un error. La elección fue mala», «Gracias a los cuatro votos de Platini y su equipo [UEFA], la Copa del Mundo fue para Qatar en lugar de Estados Unidos. Es la verdad»

Las vidas humanas

En 2010 parecía imposible que Qatar consiguiese celebrar el mundial, construir 8 estadios con una capacidad tan alta en tan poco tiempo era inconcebible. Al final lo consiguió, mejor dicho, lo consiguieron, los más de 2 millones de inmigrantes que fueron a Qatar para vivir en el infierno. Trabajando en verano, a temperaturas que alcanzan los 50º grados, sin descanso y todo por un sueldo mínimo que a veces se les retenía o ni siquiera se les pagaba.

No se puede saber la cifra exacta de las muertes por la construcción de los estadios. Qatar ha camuflado la mayoría de las muertes justificándolas con un “causa de la muerte: muerte natural”. La mayoría de los trabajadores murieron debido a las penosas vidas que les daban en Qatar, sin agua potable y en viviendas compartidas entre un montón de personas. El cambio de temperatura del exterior a la vivienda con el aire acondicionado llevo a muchos a tener enfermedades graves.

Se han hecho varios estudios para poder vislumbrar el alcance de las muertes. Amnistía Internacional señala que 15.021 trabajadores murieron por el Mundial de fútbol de Qatar. Esta cifra, procedente de las estadísticas oficiales de las autoridades cataríes, incluye a todas las personas que no tienen nacionalidad catarí que murieron en Qatar entre 2011 y 2020. Por lo tanto, esto incluye a los trabajadores poco cualificados de la construcción y al resto de personas inmigrantes en Qatar por lo que no se puede tomar como verídica esta cifra.

Por su parte, The Guardian, en su estudio publicado a principios de 2021 señala que hubo 6.751 trabajadores fallecidos. La gran diferencia de cifras viene porque limitaron su investigación a las personas procedentes de Bangladés, India, Nepal, Pakistán y Sri Lanka y solicitaron las cifras a las autoridades de los países de origen.

Seguramente no se sabrá nunca la cifra exacta. Lo cierto es que, toda la gente que murió, todos los que han enfermado y todos los que lo sufrieron esa tortura, han hecho posible este mundial. Sin ellos esto no habría sido posible, ¿y que han obtenido en compensación?, ¿qué ha obtenido en compensación la familia que dejó para ir a Qatar a trabajar?, la respuesta del mundo, el olvido.

Una sociedad retrógrada

«Van a venir muchas personas a Qatar durante la Copa del Mundo. por ejemplo, homosexuales. Lo más importante es que quienes acepten venir aquí tendrán que aceptar nuestras reglas. La homosexualidad es algo prohibido. No soy un musulmán estricto, pero es pecado, es pecado y una enfermedad mental», declaró Khalid Salman, embajador oficial de la Copa Mundial de la FIFA Catar 2022 para la televisión alemana.

La legislación catarí castiga con penas de hasta 10 años de cárcel las relaciones sexuales consentidas entre personas del mismo sexo. Condenas aún más duras para los musulmanes que pueden incluso ser sentenciados a muerte. Como respuesta, varias selecciones se han mostrado dispuestas a llevar un brazalete arcoíris contra la criminalización de las personas LGTBI en el emirato.

En cuanto a la mujer, históricamente han vivido en un sistema de discriminación constante. Las mujeres dependen de los hombres para obtener permiso sobre situaciones que nos resultan totalmente naturales, como: casarse, viajar o tomar decisiones sobre la maternidad. En los últimos años han logrado avances importantes, lo cual no significa que sigan viviendo subordinadas a un varón.

Otras muchas de las polémicas de Qatar en los últimos meses han sido: su gasto energético, el calendario o los figurantes contratados para hacer ambiente. La aclimatación de los estadios en todos los partidos supondrá un importante gasto de energía, la temperatura se intentará regular en 26º. Debido a las fechas en las que se celebra, la cantidad de bajas por lesión ha aumentado exponencialmente. Werner, Pogba, Benzema o Mané son algunos de los futbolistas que se perderán el mundial por lesiones.  Además, en los días previos al mundial, aficionados qataríes salieron a las calles con las camisetas de Brasil, Francia o España, simulando un ambiente festivo totalmente falso, otro ridículo más.

Por todas estas razones y más, el mundial de Qatar es el mundial de la vergüenza, un error de la FIFA y un escándalo en el mundo del deporte. Desde su designación, pasando por los métodos para conseguirlo y ahora todas las polémicas a su alrededor, convierten a este mundial en el peor. Por último, como reflexión, es complicado resistirse a un mundial, mucha gente lo verá, aun sabiendo las atrocidades y violaciones cometidas por el camino, lo disfrutará y animará a su país, me incluyo. Porque en el fondo, como ha dicho Blatter en su entrevista «Con el primer pitido del árbitro, ya no hablaremos de todos estos problemas, sólo de deporte».

Autor: Adrián Arranz

Fuentes: La Media Inglesa, La Vanguardia, Cadena Ser, La República, El Cronista, The Guardian, Glamour, El Confidencial

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